Lugar de memoria, antiguo recinto de detención y tortura.

En las afueras del inmueble, sobre los adoquines de la calle, se disponen 94 placas de fierro fundido con los nombres de las personas ejecutadas y detenidas desaparecidas que pasaron ahí.

Obra: Iniciativa del Colectivo Londres 38. Diseño de María Fernanda Rojas Vallejos, Macarena Silva Bustón, Heike Höpfner Fromm, Pablo Moraga Sariego. Financiamiento y Construcción del Programa de Derechos Humanos del Ministerio del Interior y Consejo de Monumentos Nacionales.

La casona ubicada en el número 38 de calle Londres, en pleno centro de Santiago, fue un recinto controlado por la Dirección de Inteligencia Nacional (DINA) que funcionó durante 1974, y donde eran llevados detenidos para ser sometidos a interrogatorios y torturas. Varias personas desparecieron desde este lugar. Sin embargo, el que fuera uno de los sitios más terroríficos del comienzo de la dictadura, hoy es un espacio público consagrado a la memoria y a la reflexión sobre los derechos humanos.